miércoles, 15 de febrero de 2012

ALBÓNDIGAS EN PEPITORIA

En pepitoria normalmente hago el pollo, pero me apetecia probar con albóndigas a ver si resultaba bien y os tengo que decir que han resultado muy ricas, con un sabor un poco diferente aunque la receta es la misma, pero el sabor del pollo no es el mismo que el de la mezcla de ternera y cerdo, lo importante es, que en casa, a todos, incluidos los nietos se han rebañado el plato y ya sabeis que eso siempre es buena señal, espero que a vosotros tambien os guste.

Ingredientes
1 kilo de carne picada (ternera y cerdo)
2 huevos
leche
almendras
2 rebanadas de pan de molde o miga de barra
1 lata pequeña de paté de de jabugo
1 vaso de vino blanco
2 zanahorias pequeñas
1 cebolla pequeña
2 huevo duro
harina, sal y pimienta
Modo de hacerlo
Poner en un bol la miga de pan con la leche para que empape, añadirle los huevos, el paté, las zanahorias muy picadas y la carne picada, mezclar muy bien ( yo con la mano con guantes quirúrgicos), poner la sal y un poco de pimienta, volver a mezclar y hacer las albóndigas, pasar por harina, reservar.
En un recipiente con abundante aceite freir la cebolla, cuando este dorada poner en el mortero escurrida del aceite, en ese mismo aceite freir las albóndigas y las pondremos en la olla rápida, añadiremos el aceite en que las hemos frito y añadiremos el vino blanco, dejaremos que evapore y añadiremos un vaso de agua, pondremos un punto de sal y cerraremos la olla, dejaremos subir las rayas y contaremos 2 minutos.
Mientras pasa ese tiempo machacaremos en el mortero la cebolla y las almendras, cuando lo tengamos como una pasta poner las yemas de los huevos duros, ponerle un chorito de agua y disolver un poco, añadirlo a la olla con las albóndigas mover y dejar a fuego lento 5/10 minutos.
Cortar las claras de huevo a trocitos y ponerlas por encima al momento de servir.
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Congelación


Estamos entrando en el tiempo de los platos de cuchara y me refiero a las legumbres, las hemos comido en verano, pero en ensaladas, ahora serán más consistentes y no está de más que tengamos congelados y previamente remojados, unos garbanzos, que en cualquier momento podemos usar, pues es la única legumbre que se tiene que poner con el agua hirviendo, por lo que si se nos ha olvidado el remojo lo tenemos al alcance de la
mano en nuestro congelador.
Con respecto a las alubias, es mejor congelarlas una vez cocidas, solamente con un poco de sal. Descongelar y cocinar al gusto, podemos cocer de una vez más cantidad y guardarlas en porciones para sacar lo que necesitemos, de ésta manera sobre todo para las personas solas no tienen escusas para comerse un plato calentito en invierno con poco trabajo.
Lo mismo podemos hacer con un buen caldo, para tomar un cosomé o ponerles unos fideos para la cena. Si usamos las ollas
rápidas, en
muy poco tiempo y poniéndolo en porciones será un aliado para esas noches frias cuando se vuelve del trabajo.